Cómo hacer una vermicompostadora casera con macetas en pocos pasos

¡Estás desechando un recurso valioso sin saberlo! 🌱 Cada vez que tiras restos de comida, pierdes la oportunidad de convertirlos en un fertilizante natural que hará maravillas por tus plantas.

¿Sabías que toneladas de desechos orgánicos terminan en la basura cada día? 🗑️ No solo desperdiciamos, sino que también le quitamos a nuestro jardín los nutrientes que necesita. Y no nos olvidemos del impacto ambiental.

Con el vermicompostaje, tus desechos orgánicos se transforman en un abono lleno de vida gracias a las lombrices rojas. Ellas hacen todo el trabajo: reciclan tus residuos, nutren tu jardín de forma sencilla y sostenible.

Materiales necesarios:

1. Cuatro macetas de plástico, o más, del mismo tamaño y que encajen unas dentro de otras.

2. Lombrices rojas californianas, yo las compré en tiendas como cebo vivo de pesca, pero ya se pueden encontrar y comprar por internet (aproximadamente 100 g para empezar). Si alguien te da y no llega a 100, no pasa nada, se reproducen muy rápido.

3. Sustrato inicial, tierra blanda, porosa que retenga humedad, (no vale la tierra marrón arcillosa sola) y algo de material vegetal verde o medio descompuesto. Hay que humedecerlo todo.

4. Cuando ya lo tengamos montado iremos necesitando material vegetal: restos de desperdicios de casa, como peladuras de verduras, posos de café, resto infusiones, frutas que se han pasado (les gusta mucho la fruta dulce, tipo melón, sandía, fresas, etc), y también restos “marrones” es decir, restos de hojas secas, pieles de cebolla, algo de papel… así equilibramos la cantidad de carbono y de nitrógeno que tendrá nuestro vermicompost.

5. Una tapa, puede ser de plástico o tela para cubrir la maceta superior.

7. Taladro o un clavo grueso para hacer agujeros.

Paso a paso para crear tu vermicompostadora casera:

1. Preparar las macetas:

- Toma 3 de las 4 macetas y realiza agujeros en la base con un taladro o un clavo grueso. Estos agujeros permitirán que los líquidos drenen y que las lombrices puedan moverse entre los diferentes niveles o macetas.

- También es conveniente (aunque no indispensable) realizar unos pequeños agujeros laterales en la parte superior de cada maceta para que circule el aire.

2. Montar la estructura:

- Coloca la maceta sin agujeros en la base. Esta será la encargada de recoger los lixiviados (líquido que produce el compostaje, y que es un gran abono orgánico). ësta siempre estará en la base.

- Encima de esta, coloca una de las macetas con agujeros. Este será el primer nivel donde comenzarán a trabajar las lombrices. Aquí pondremos el lecho de las lombrices, en esta primera maceta es conveniente poner una pequeña capa de periódico en la base, para que las lombrices no se vayan a la de abajo a la primera de cambio. Luego pondremos el material vegetal junto con la tierra o sustrato (al menos de 5cm de espesor), lo humedecemos y ponemos las lombrices. Encima de esta maceta pondremos otra maceta.

3. Agregar la segunda maceta agujereada:

- Una vez que la primera maceta se llene de futuro compost, es decir, restos vegetales con algo de tierra y las lombrices, puedes colocar la segunda maceta perforada encima de la primera, que iremos llenando con más restos vegetales. Las lombrices migrarán hacia arriba en busca de nuevos alimentos. Así, en la primera maceta quedará solo compost listo para usar, al cabo de unas semanas, hay que darles tiempo para que hagan "su magia".

4. Cubrir la vermicompostadora:

- Coloca la tapa o una tela sobre la maceta superior para evitar que entre exceso de luz o que se reseque el interior.

5. Recolectar los lixiviados:

- La maceta inferior servirá para recolectar los líquidos que produzca el compost. Este "té de lombriz" es un fertilizante muy nutritivo para tus plantas.

Cuidados y mantenimiento:

- Humedad: Mantén el sustrato húmedo pero no empapado. Puedes rociar un poco de agua si notas que está seco, los restos vegetales frescos van soltando agua también.

- Oxigenación: Remueve el contenido suavemente una vez al mes para evitar que se compacte demasiado y asegurar que las lombrices tengan suficiente oxígeno.

Recoger el compost:

- Después de unos 2-3 semanas, el compost estará listo para usarse. Puedes extraer el compost final de la maceta inferior, donde se habrá acumulado mientras las lombrices suben a los niveles superiores para alimentarse. Para asegurarte que no quedan lombrices, ponemos esta maceta en la parte superior, pero en contacto con la maceta de abajo, removemos y dejamos abierta al sol, para que si queda alguna huyan de éste y se vayan a las macetas inferiores.

Con esta vermicompostadora casera podrás reducir tus residuos orgánicos y generar compost de alta calidad para tus plantas. Si tienes alguna duda o quieres mejorar algo basado en tu video, ¡estaremos encantados de ayudarte!